Han naturalizado la comprar de votos a costa del hambre de indígenas, denuncian

El alcalde de Guachochi, Andrés Balleza Carreón cumple hoy 20 días en huelga de hambre para protestar contra la compraventa de votos a costa de la pobreza de los indígenas.

La misma denuncia, hacen  los sacerdotes Ignacio Becerra Trigeros, vicario de la parroquia de Carichí y Javier “El Pato” Ávila, párroco y defensor de derechos humanos en el municipio de Bocoyna.

El sacerdote Ignacio Becerra destacó que la sequía ha afectado a las comunidades indígenas en Carichí, debido a que la lluvia no se ha regularizado y sólo han podido sembrar en algunas partes.

Esa situación, de hambre, la han aprovechado el candidato por el PRI y PRD, Cipriano Enríquez Chávez, para “apoyar” a los indígenas en sus fiestas religiosas aún fuera de fechas tradicionales, con comidas que pronto les cobrarán, con sus votos.

“Les proponen (los políticos) hacer una fiesta y la gente sede la petición de la fiesta indígena, esto sucedió en Chineachi”, explicó.

Mencionó la comunidad de Huacareachi donde viven 25 familias, por ejemplo, y en donde cuentan con ningún apoyo. Los habitantes son indígenas y hacen hasta una hora de camino en busca de agua.

En Carichí, el gobierno municipal es del PRD, y hay tres candidatos para contender por la alcaldía el próximo 7 de julio: el del PAN, uno del PVEM y el tercero es impulsado por el PRI, PRD y PANAL.

En ese municipio, específicamente en Baquiachi,  se han registrado brotes de violencia, derivado de la lucha por las tierras que tienen los indígenas contra ejidatarios que les han usurpado sus tierras.

El sacerdote  Ignacio Becerra dijo que hace unos días, el hijo de uno de los ejidatarios Jesús María Sandoval y su hijo, estuvo disparando al aire, durante una reunión para intimidar a la comunidad, luego de que los indígenas han ganado una serie de juicios y están en proceso otros más.

El manejo de los indígenas con fines electorales se ha naturalizado en la Sierra Tarahumara, dice el sacerdote Javier “El Pato” Ávila.

Los políticos sólo aparecen cuando están en campaña. “Yo no creo en ningún partido. Unos llevan vacas, abrazan a todos los niños sólo en campaña, hasta Peña Nieto vino a abrazar mujeres indígenas, son actos ridículos, corrientes, porque nunca hacen nada por ellos”.

Los acarreos son comunes en los procesos electorales, les dan sólo tortas o cualquier cosa para que voten por ellos.

“Además, hacen movimientos suaves, a través de las instituciones y no voy a decir cuáles, llega la autoridad para pedirles los datos de su credencial de elector o los corren, les piden el número de su credencial y es necesario balconear esos hechos. Son unos cínicos pidiendo credenciales para dirigir el voto de los empleados”, denunció.

En Guachochi, el alcalde asegura panista que su salud se encuentra en buen estado, luego de 20 días de ayuno, medida que ha implementado como una presión moral para inhibir las prácticas electorales ilegales.

“Hasta ahora se sabe de irregularidades que los muchachos han visto, yo no me puedo meter en el proceso, mi intención es tener ascendencia moral para cuando exhiban en su momento, el carrusel y todas las otras prácticas que efectúan tradicionalmente.

Informó que el 24 de mayo en Tónachi, hubo una concentración indígena organizada por el candidato del PRI. Los panistas  recibieron “el pitazo” sobre el evento, donde se encontraban los candidatos priistas a la alcaldía, José Leobardo Acosta Aguirre y a la diputación, Mayra Díaz Guerra.

Lograron captar imágenes de un camión con víveres y tesgüino por parte del PRI. “Pero los del PAN no accionaron y se la revirtieron. Los del PRI convencieron a los indígenas de denunciarlos ante la Comisión de Derechos Humanos, por impedir una fiesta a la Virgen de Guadalupe y por frustrar la entrega de alimentos para 400 familias, que eran 8 toneladas de maíz y frijol presuntamente donados por la comunidad menonita.

“Hay fotos, pero no hicieron aún nada. Además, la ley electoral de Chihuahua, indica que cualquier denuncia de ese tipo, debe ir con un acta notarial, y aquí en la región sólo hay un notario, no se daría abasto para tanta irregularidad. El año pasado, para variar, el notario tuvo que salir en las elecciones”, explicó el edil.

Los candidatos por el PAN en Guachochi son Jesús Omero Hernández García para la alcadía y la ex gobernadora indígena, María Marcelina Bustillos.

SELLOS MANUALES, UNA MEDIDA PARA EVITAR FRAUDE

Para evitar la compra de representantes de casillas, el alcalde ideó  colocar unos sellos elaborados a mano con un material especial, para plasmarlos en cada boleta por los funcionarios de casilla.

El doctor Balleza indica que lo ideal para evitar un fraude es que cada papeleta vaya firmada por los funcionarios y así tener la certeza de que no meten boletas externas.

Sin embargo, debido a que la mayoría de los representantes de casilla son rarámuris o mestizos con escolaridad mínima, firman muy lento, por lo que abren las casillas hasta las 10 u 11 de la mañana, y ante la presión de los representantes de partidos, deciden no firmarlos.

Con los sellos agilizan el procedimiento, ya que ponen sólo uno por boleta y de esa manera tienen la certeza de que se utilizan sólo las boletas que les son entregadas a los funcionarios y no introducen otras s ya marcadas.

“A cada papeleta se le pone con el sello el número de casilla, en forma de rombo, cuadrado o círculo, son difíciles de falsificar”, detalló.