*El IEE y el yo te lo juro que yo no fui
*Aumento electoral
*Mesa de partidos, sin partidos
*Campañas RIP
*Otros que se vieron rápidos, aunque seis meses
después, fueron las autoridades de Gobierno, específicamente de la Secretaría
de Hacienda al anunciar, en plena veda electoral, que se destinarían 100 millones
de pesos para el aumento a burócratas; un aumento que debió otorgarse, como
todos los años, desde enero y no días antes de la elección. Desde luego, el
asunto no pasó desapercibido para los panistas también, que tacharon la medida
como electorera.
*Como una manera de darle seguimiento al supuesto “Pacto
por México” estatal, el gobernador César Duarte se reunió ayer con dirigentes
de partidos, que sin embargo, todos son, de alguna o de todas maneras, aliados
del PRI en esta elección. El ausente fue el PAN que tras la polémica suscitada
con el video donde se muestra a la esposa del gobernador haciendo proselitismo
político, anunció su retiro de la mesa. Habrá que esperar si fue muy
inteligente la decisión del PAN de haber abandonado este “adéndum” que, se
dijo, busca la transparencia en la elección, ya que ante cualquier incidente, seguramente
el primer argumento será que el PAN abandonó la mesa de “diálogo”.
*Finalmente, las campañas electorales llegan hoy a su
final, luego de 35 días de visitas, recorridos, boletines al por mayor, los
mismos discursos, las mismas promesas, y las acusaciones de siempre de compra
de votos, de uso de recursos públicos, de intromisión, de esto y aquello. Candidatos
al vapor, compadres de este o aquel, hijos de los otros, toda una diversidad a
las boletas que el ciudadano deberá cruzar. Ojala lo haga convencido, al menos
confiado, en las mejores propuestas, que si bien brillan por su ausencia, siempre
será mejor meditar el voto que regalarlo. Ojala no fuera así, pero sin duda, se
espera una jornada intensa, con acusaciones al por mayor de “mapacheo”, que
vengan de donde vengan, sólo contribuyen a enrarecer aún más el ambiente político
y también social, aunque bueno, siempre habrá quien prefiera quedarse en casa a
ver la televisión o hacer cualquier otra cosa, que ayudar a que continúen los circos de
cada tres o seis años, en los que los funcionarios hacen como que gobiernan, como que gestionan, como que cumplen; y los ciudadanos hacen como que no se enteran.
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