Ese día, María del Carmen De Jesús decidió romper el silencio. Le llevó seis meses conocer el rostro de la indolencia y la impunidad en el camino de las víctimas de desaparición frente a las autoridades, para adherirse a las familias que se acompañan en ese laberinto desde hace meses, años, hasta quince años.
“¿Qué vamos a saber algo, si se los llevaron los malos, van
con la cara cubierta? Las autoridades tienen miedo de entrar al pueblo”, dice
María de Jesús.
Las denuncias fueron concentradas en un solo expediente de
la Fiscalía Zona Occidente. “Unos agentes de Bahuichivo (municipio de Urique),
sólo han venido pero no nos dicen nada. Dijeron que entraron 35 unidades al
municipio pero no logran nada, fueron muchos porque hasta ellos tienen miedo de
entrar solos”.
María de Jesús dependía de su hijo, es madre sola y tiene
otros tres hijos. La Fiscalía le ha ofrecido apoyo psicológico a la familia y
en el caso de uno de los hijos, una beca para que continúe sus estudios en uno de los CBTIS de la capital, de donde son
originarios.
La familia tenía seguro social por Arturo, pero ahora no
tiene nada.
“Yo ya les dije: ‘si a ustedes les faltan agallas a mí no,
allá sólo nos dan largas, nada de resultados” , dice decidida.
CADA VEZ SON MÁS NIÑOS, VÍCTIMAS COLATERALES
Con el reclamo al gobernador César Duarte Jáquez, quien se encontraba en el homenaje por 40 años de trayectoria de Juan Gabriel en el Palacio de Bellas Artes porque se utilizaron recursos públicos de Chihuahua para hacerlo, inició la conmemoración del día.
El contingente inicio las actividades con la colocación de
una manta con las fotografías de las personas desaparecidas, en uno de los
puentes principales de la avenida Tecnológico.
De ahí caminaron hacia la plaza Hidalgo y se colocaron junto
a la cruz de clavos, símbolo de las luchas sociales que han emprendido miles de
chihuahuenses y donde se encuentran las cruces de quienes han sido asesinados.
El helicóptero de seguridad pública sobrevolaba la plaza,
mientras se apoyaban para cargar con tanto dolor. De manera voluntaria, una a
una tomó el micrófono.
Ahí estaban decenas de niños, cada vez son más familias que
se atreven a romper el silencio y salir a las calles para romper el miedo y las
amenazas institucionales.
En ese lugar arrancaron la campaña “Te busco siempre”.
En ese lugar arrancaron la campaña “Te busco siempre”.
Lourdes Hernández, su mamá, ha luchado por encontrarla, por investigar y no pierde la esperanza de encontrarla con vida, así lo dijo frente a sus dos nietas, quienes sostenían una manta para exigirle a gobierno, justicia.
Frente a ella estaban las otras madres, que apoyaban con
llanto de comprensión y solidaridad. “Nos apoyamos unas a otras, a mí Emma
Muñoz (a quien le desaparecieron a ocho integrantes de su familia en Anáhuac,
del municipio de Cuauhtémoc en el 2011), me ayuda a salir adelante, porque
pienso que si mi dolor por no encontrar a mi hijo es grande, el de ella debe
ser mayor, porque no encuentra a su esposo, cuatro hijos, a su sobrino, un
nieto y a su yerno”, diría Teodocia Domínguez.
En Chihuahua se reportan por lo menos mil 552 personas
desaparecidas, y aunque la cifra negra se desconoce, es muy alta, indicó Luz
Estela Castro.
Cuauhtémoc es el municipio en el que más han desaparecido
personas los últimos dos años. Gabino Gómez Escárcega, integrante de El Barzón,
estima que son unas 300 personas desaparecidas en esa región. Tan solo, en dos
meses del 2011, desaparecieron 61 personas, la mayoría hombres.
Leticia Sánchez, de Cuauhtémoc reprochó que nadie encuentre a su
hijo Fabián Arturo Trevizo Rivas, quien apenas tenía 17 años. Se lo llevaron de
a fuera de su casa, con otros diez adolescentes el 22 de mayo del 2010, sólo
aparecieron siete pero asesinados en la carretera a Carichí. Los otros tres aún
no aparecen. “Mi hijo era un niño, planeaba venir a estudiar su carrera a
Chihuahua”.
“Las autoridades no hablan, la empresa menos, han llegado a decir que se fue con una mujer y al rato regresa, está fuera de lógica”.
La esposa de Mario Lozano Arévalo, desaparecido también en
Cuauhtémoc, dijo frente a sus hijos pequeños, que se quedó sola con ellos y lo
necesitan. Como ella, desfilaron otros testimonios de mujeres que se quedaron
al frente de la familia y con la consigna de encontrarlos, de investigar y
exigir justicia. Su esposo desapareció en abril del 2011.
LA VELADA
Las familias recorrieron la calle Libertad, de la plaza
Hidalgo hacia la explanada del edificio del Ayuntamiento. Cuando llegaron,
Gabino Gómez tomó el micrófono para explicar el motivo de la presencia de
personas con carteles y la gente se solidarizó.
Hicieron un minuto de silencio y posteriormente proyectaron los nombres de los desaparecidos del país, en el edificio de la Presidencia Municipal, entre veladoras y música instrumental.
Con una plegaria hacia el cielo, hacia el ser supremo en el cada quien crea, hicieron una oración para sobrellevar su situación y
pidieron misericordia para quienes los
dañaron
El alcalde hizo acto de presencia, pese a la represión
gobierno del Estado ha impuesto contra los manifestantes. De extracción
priista, Marco Adán Quezada Martínez dijo que decidieron abrirles el espacio
porque pretenden que esa área sea el corazón cultural de Chihuahua, donde los
ideales puedan florecer.
Aseguro que respetarán cada causa legítima porque no hay
otra manera de construir una mejor comunidad y procurar una relación humana.
LA EXIGENCIA
-
Reconocimiento de las desapariciones forzadas e
involuntarias
-
Implementación efectiva de la Ley General de Víctimas
-
Cumplimento de las recomendaciones del grupo de trabajo
de desaparición forzada de la ONU.
-
Que el gobierno federal reciba todos los casos de
desaparición en la Unidad Especializada de búsqueda de personas desaparecidas
de la PGR
-
Instalar mesas de trabajo periódicas para conocer
avances de las investigaciones
-
Contratación de expertos independientes en
investigaciones.
-
Contratación del equipo argentino de antropología
forense
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